1) Felices: El éxito sin felicidad es alimento del egoísmo, pero felicidad con éxito es felicidad plena. No todo lo que te hace exitoso te termina haciendo

feliz, pero toda persona feliz es exitosa. Porque lo que se hace desde la felicidad se logra ver desde una mirada distinta.

2) Multitud: La gente va y viene y también la gente opina todo lo que quiere. Uno muchas veces se detiene en lo que la gente habla y dice, pero se olvida que los comentarios hoy pueden ser buenos y mañana malos. La vida cambia y las opiniones también. De ser un ídolo a un villano puede pasar de una publicación a otra o de un estado a otro. Por eso refúgiate en Dios y aprende a escuchar tu interior para actuar en tu exterior.

3) Fruto: Tu vida se define, para muchos, por tus acciones más que por tus esfuerzos. Eso lo experimenté mucho en estos tiempos. La gente no valorará las horas de viaje realizadas, pero sí la charla que les dí. No valorará la cantidad de horas sin dormir que llevo, pero sí las misas que les dí. No valorará los días que estuve enfermo y lo mismo los atendí, pero sí valorará las confesiones que les dí. Hay veces que nos olvidamos que detrás de un acto hay un sacrificio. Valora a las personas que hacen algo por vos y, si podés, pregúntales cómo están. Algo bueno está por venir.

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