1) Atravesaba: Nadie ha conseguido el éxito quejándose. Nadie consiguió el éxito criticando a los demás. Nadie consigue el éxito buscando excusas. Estas actitudes de queja, crítica o excusas nunca te llevarán un punto a favor. Así que trágate el ego y el orgullo para empezar a centrarte en tus propias acciones y mentalízate en lo que Dios te pide a vos y no a otros.

2) No podía: Hay una gran diferencia entre abandonar algo por no tener valor y el dejar algo o a alguien por el hecho de decir “Basta”, porque ya fue suficiente. Por lo tanto, aprende a ver los límites y hacer respetar tus límites para que puedas mirar a dónde se dirige tu vida y a dónde quieres encauzar tu vida, hay situaciones que son necesarias dejarlas y otras, lucharlas.

3) Baja: Aprende a dejarte corregir porque si alguien te corrige es porque le importas. Me refiero a esa persona que ve algo mal en mí y me lo dice con caridad y con actitud de respeto. Cambia la mirada y así cambiará tu forma de ver. Porque quien te corrige es porque te quiere. La otra vez un cura me invitó a comer una pizza y tuvo la delicadeza de invitarme a comer para corregirme y decirme cosas que yo estaba haciendo mal. Aprendí que quien te quiere te corrige a solas y hasta te anima a que te sientas bien. Déjate corregir y baja un poco para poder mejor ver. Algo bueno está por venir.