El Día Mundial contra la Trata de Personas se celebra el 30 de julio de cada año. Esta fecha fue establecida por la Asamblea General de las Naciones

Unidas en 2013 para concienciar sobre la situación de las víctimas del tráfico humano y para promover y proteger sus derechos.

La trata de personas es un delito grave que explota a mujeres, niños y hombres con numerosos propósitos, incluidos el trabajo forzado y el sexo. Las Naciones Unidas y otras organizaciones utilizan este día para destacar la importancia de la prevención, la protección de las víctimas y el enjuiciamiento de los tratantes.

Cada año, la ONU selecciona un tema específico para el Día Mundial contra la Trata de Personas. Por ejemplo, en 2023, el tema fue "Llegar a todas las víctimas de la trata, no dejar a nadie atrás", poniendo énfasis en que todas las víctimas deben ser reconocidas y asistidas.

Este día es una oportunidad para que gobiernos, organizaciones y la sociedad civil se unan para sensibilizar y tomar medidas concretas para combatir este flagelo global.