Nos referimos a nuevos daños sufridos en la ermita de Shoenstatt por estos días, edificación situada a 500 mts al norte de la ciudad en camino que va a Colonia Medici.
En esta ocasión se trató de rotura de vidrios, ingreso al lugar y dispersión de barniz, alcohol y arena sobre la imagen en particular y derredores entre otros.
"Somos victimas continuas de todo tipo de daños que no solo afectan lo material, sino principalemente lo afectivo, lo moral ... estas acciones duelen, son daños sin sentido. Todas las semanas nos rompen algo, vidrios, reflectores, barretean las puerta, roban cables, tiran basura y demás... ya no sabemos que hacer...!" comenta angustiada una de las asiduas habitues y a la vez devota.