Un terreno baldío en calle Corrientes al 1400, y un sector rural al sur, lindante a vías a Casilda en derredor del viejo basural, fueron los emergencias de Bomberos en la hora de la siesta Cañadense.
En el primer caso, si bien la quema medianamente estaba controlada, el incendio de un cartel hizo que vecinos llamaran a Bomberos tras alarmarse los mismos sobre posibles peores consecuencias.
En el segundo caso, el foco se habría generado en una montaña de aserrín, lo que al ser advertido por el dueño del campo, puso en acción los discos removiendo el terreno para cortar el fuego, mientras Bomberos trabajaban sobre el primer sitio descripto.




































